Recibí tres preguntas sobre el desarrollo espiritual de las mujeres
Pregunta: ¿Los hombres de Bnei Baruj que están por encima de este mundo pueden «llevar» a una mujer a través del Majsom, si ella ya está preparada para ello? ¿O, las mujeres tienen que esperar un cierto número de almas masculinas corregidas; y en caso afirmativo cuál sería este número?
Mi respuesta: Tal vez en nuestro mundo existen hombres que llevan a todos lados a sus mujeres, ¡pero, eso no existe en el mundo espiritual! Si una mujer ya está lista, ella absorbe la fuerza del grupo de los hombres y participa al atravesar el Majsom junto con todos.
Pregunta: ¿Qué tan importante es que una mujer estudie en un grupo? Mi egoísmo no me permite sobreponerme a la antipatía que siento por los miembros del grupo en mi ciudad. ¿Será posible crecer espiritualmente en un grupo de personas que me son tan ajenas que siento aversión?
Mi respuesta: No existe tal cosa como un grupo de mujeres. Una mujer y el grupo son incompatibles.
Pregunta: ¿Si mi esencia de mujer es proveer la carencia, entonces al desarrollar el atributo de otorgamiento (en lugar del deseo de recibir) no me volveré similar a un hombre? ¿Y entonces, a quien le van a dar los hombres?
Mi respuesta: Dentro de cada uno de nosotros existe una parte masculina y otra femenina: el Kli (nuestro deseo) y la Luz (nuestra intención de otorgar). Debe usted buscar la combinación correcta entre los dos.
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