Profetas, Yehoshua 20:1- 20:3: Y el Señor dijo a Yehoshua, “Habla a los hijos de Israel, diles, ‘Preparen para ustedes ciudades de refugio, de las que les hablé a través de Moisés. De las cuales un cazador que mata a cualquier persona sin tener conciencia, involuntariamente, huirá y será para ustedes como un refugio del vengador de la sangre.
Una de las primeras leyes al entrar a la tierra de Israel es construir ciudades de refugio, porque los hijos de Israel trabajan en contra de su egoísmo. En este trabajo, inevitablemente surgen contradicciones, guerras contra el ego y su fallecimiento. Por eso, debes saber cómo trabajar con los deseos que no puedes manejar ni corregir, si no es en el primer intento, en el segundo o en el tercero.
Pregunta: ¿Quién decide que el asesinato fue de forma no intencional, inadvertida?
Respuesta: El hombre lo revela todo sobre el trasfondo del trabajo consigo mismo y con la sociedad. Porque la luz superior brilla sobre él y forma todos sus deseos, así mientras avanza, sus deseos son clasificados en su interior. Puedes trabajar más con ciertos deseos, menos con otros: cometiste un error aquí, allá ni siquiera cometiste un error, sino que, deliberadamente los usaste de manera egoísta.
Todo existe en cada uno y en su trabajo con la gente a su alrededor. Por eso, la Torá predice todos los estados.
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De Kabtv “Secretos del Libro Eterno” 16/ago/21
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