La conexión con los amigos – enfoque cabalista

La raíz de todos los pecados es el deseo de recibir para recibir, que es lo que una persona recibe del Creador, es decir, de Su dominio, y lo deja todo en su propio dominio, lo que se llama «robo». Es decir, él extrae del dominio del Creador, y lleva los placeres del dominio del Creador al suyo. De esto se desprende que no es considerado como un ladrón sino como un asaltante, porque, aunque el Creador lo ve tomando, su deseo de recibir es tan fuerte que no puede resistirlo, por lo cual es considerado un asaltante y no un ladrón (Rabash. Artículo No. 20, 1986. ¿Debe uno pecar y ser culpable?).

 

Pregunta:

¿Cómo podemos resistir a un ladrón y a un asaltante? ¿Cuál es la diferencia?

Mi Respuesta:

Solo podemos atrapar al ladrón y quitarle lo robado. ¿Cómo se hace esto? Aún tenemos que aprenderlo.

 

Sin embargo, tenemos que atrapar al ladrón para quitarle el botín, asustarle y luchar con él porque quiere llevárselo todo. Ya tiene claro lo que le estamos quitando o lo que nos ha robado.

Pregunta

¿Qué ayuda en la guerra conmigo mismo cuando me doy cuenta de que soy un ladrón?

Respuesta:

Solo la conexión con los amigos; no hay nada más. A partir de ahí, recibirás una respuesta para cualquier estado.

Descubre más     Gracias a la conexión con los amigos

 

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