Toda la realidad fue emanada y creada con un solo pensamiento. Es el operador; es la operación misma; es la recompensa buscada, y es la esencia del trabajo (Baal HaSulam, Estudio de las Diez Sefirot, Vol. 1, Parte 1, Observación Interior)
Este pensamiento de la creación lo contiene todo, desde el principio hasta el fin, en todas sus formas.
Pregunta
¿Mis esfuerzos y mi recompensa pertenecen también a este pensamiento?
Respuesta:
No, no estamos hablando de nosotros, sino del Creador, de la luz que viene del Creador y construye toda la creación.
La recompensa está dentro de esta luz. El Creador causa ciertas acciones en la creación, y Él también llena a los seres creados con luz.