He recibido muchas preguntas sobre la razón de nuestro sufrimiento y la crisis actual. He aquí mi respuesta:
La Cabalá afirma que existe una única razón por todo lo que está ocurriendo: el hombre no ha podido acatar la ley de equilibro con la Naturaleza, o dicho de otra forma, no ha cumplido con la ley de equivalencia con el Creador. Justamente, el no poder cumplir con el equilibrio en el nivel más elevado, llamado humano, para llevar relaciones interpersonales según el principio de «Ama a tu prójimo como a ti mismo», conduce a una ruptura en el equilibrio en niveles inferiores. Como resultado, los reinos vegetal y animal se están extinguiendo y el equilibrio de las fuerzas en el nivel inanimado de la naturaleza se ha interrumpido también. Todo lo anterior es la consecuencia de nuestros pensamientos, deseos y acciones egoístas.
No es un accidente que los más importantes financieros hayan correctamente señalado la razón de la crisis financiera: es una crisis de valores morales, en donde la avaricia ha dado lugar a una avalancha irresponsable de acumulación. Pero como podemos verlo, el sufrimiento enseña a las personas, incluyendo a los financieros a percibir la razón de su infortunio. Como resultado, el gran sufrimiento (al punto del hambre y la extinción inminente) nos forzarán a reestructurar nuestra actitud egoísta hacia la humanidad y el mundo.
La Cabalá nos ofrece una forma de implementar estos cambios voluntaria y agradablemente, antes que las crisis nos alcancen. De otra forma seguirán presentándose como las plagas de Egipto.
Es muy difícil entender la forma en que el egoísmo influye en los desastres naturales y el calentamiento global. Sin embargo, en este rubro también el sufrimiento nos ayudará a determinar la razón de los acontecimientos. Las tormentas en todo el globo van a seguir cobrando ímpetu y el que los glaciares de Groenlandia se derritan provocará grandes tornados. Cuando todo esto suceda, de pronto nos va a quedar claro que la razón de todos estos fenómenos es nuestro egoísmo y el odio infundado entre nosotros. De esta forma, la Naturaleza les enseñará a los humanos a convertirse en Humanos, cumplir con la ley de equivalencia y alcanzar el equilibrio
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