La tierra de Israel y el derecho de asentamiento temporal

Dr. Michael LaitmanBaal HaSulam, «La herencia de la tierra»: Israel no regresará a su tierra hasta que todos sean un solo grupo.

Pregunta: ¿Cómo logra uno el deseo de regresar a la tierra espiritual de Israel?

Respuesta: El deseo crece a través de las Klipot (cáscaras), éste se procesa y se transforma en un deseo, Yashar El (directo al Creador).

La tierra física de Israel no puede dar fruto, es decir que no puede mantener sobre ella a las personas, si éstas no se realizan el propósito de la creación. Entonces, si el pueblo judío abandona esta zona, nadie puede vivir aquí. Incluso los árabes cercanos nosotros, aquellos que han sido relativamente más éxitos en comparación con las naciones árabes, no serán capaces de continuar sin los judíos.

En general, la situación actual se arregla con la expectativa y la esperanza de que el pueblo judío comience a corregirse a sí mismo y se sometan la tierra de Israel. Es precisamente esta condición la que hace posible que los judíos y los árabes existan aquí mientras tanto. Pero si el pueblo judío no realiza su misión, ellos tendrán que dejar esta tierra, independientemente de las razones.

Y puesto que otras naciones tampoco pueden sostenerse aquí, esta tierra será destruida por las guerras, como lo que ocurre hoy en día en Siria, y aún es peor.

Pregunta: ¿Qué pasa si una persona quiere estar en la tierra de Israel, pero no se siente atraída por la tierra espiritual de Israel?

Respuesta: La aspiración a estar en la tierra física de Israel es peor que estar por fuera de la tierra. En vez de estar aquí en la tierra física de Israel y no estar en concordancia con el concepto de la «tierra de Israel», es mejor vivir en otro lugar.

Como se entiende, esto no significa que la persona debe permanecer en el exterior. La idea es que ella debe corregirse a sí misma y estar en su propia tierra interna de Israel, con el deseo de Yashar El (directo al Creador), de unidad, conexión y amor por los demás. En contraste con esto, las personas que viven aquí todavía no están corrigiéndose y todo el tiempo crean problemas para sí mismas.

De hecho, nadie en este mundo, a excepción de nosotros, tiene libertad de elección, porque nosotros existimos con dos fuerzas. Tenemos un ego mucho mayor que todas las naciones del mundo, y tenemos una chispa espiritual. Y entre estas dos fuerzas, podemos elegir qué camino tomar. Las naciones del mundo están dirigidas por un único deseo de recibir. El deseo que las atrae es lo que hace que se ellas muevan.

Así que no tenemos nada que demandar y no hay nadie a quien exigirle. De hecho, nosotros no dependemos en absoluto de personas como el secretario de Estado Kerry o el presidente Obama. No hay ninguna razón para esperar la justicia o la verdadera solidaridad de ellos, dado que ellos también son manejados desde Arriba. Nosotros dependemos sólo del hecho de mantener o no el programa de la creación. Sólo la conexión entre nosotros puede mejorar nuestra condición.

Entonces, si quieren vivir en la tierra de Israel, ustedes deben saber que para venir a vivir aquí, deben cambiarse a sí mismos de acuerdo a la tierra de Israel. De hecho, esta es una tierra única que se traga a sus habitantes si no están en concordancia con su esencia.

Mientras tanto, nosotros vivimos aquí, por así decirlo, por la gracia del Elyon (Superior), y simplemente nos dan esta situación por un tiempo a fin de que nos corrijamos a nosotros mismos. De acuerdo a ese mismo principio, después de salir de Egipto, el pueblo judío recibió un «permiso de entrada» a la tierra de Israel a condición de que viviera «como un hombre con un corazón», según la regla general: «Y Amarás a tu prójimo como a ti mismo».

Sólo si vivimos en unidad tendremos el derecho de estar aquí. A las personas se les dieron cuarenta años en el desierto para prepararse para el nivel de Bina. Entonces tuvieron la necesidad de conquistar esta tierra, lo cual significa que las personas recibieron los deseos que tenían que conquistar. Trabajar con ellos fue muy difícil.

Pregunta: ¿Por qué nuestros vecinos también tienen un deseo por esta tierra?

Respuesta: Porque esta tierra es hermosa y buena. De hecho, los judíos que están aquí la desarrollaron. Pero en el momento en salgan, ésta se convertirá nuevamente en un desierto.

Por lo tanto, las personas que quiere vivir aquí son dirigidas por el Creador. Y a los judíos, este deseo se los dan libremente para que el deseo de ellos sea como Su deseo. Toda la diferencia está en nuestra libertad de elección. Y las naciones se comportan precisamente de acuerdo al balance de fuerzas dentro de nosotros.

(134025 – De la 5° parte de la lección diaria de Cabalá del 4/30/14, Escritos de Baal HaSulam)

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