Comentario: Los expertos predicen firmemente una inminente hambruna mundial. El año 2021 fue terrible, debido a que la pandemia trajo un incremento del 25% en las cifras de personas hambrientas en el mundo. El 2022 promete ser aún peor como consecuencia de la guerra. Así que se espera una triple crisis: alimentaria, energética y financiera. Como resultado se dice que 2023 será el más terrible. Los especialistas escriben al respecto, pero de alguna forma no escuchamos. Es casi como si no nos importara.
Mi Respuesta: ¿Qué podemos hacer?
Comentario: Al menos, tener miedo. Abastecerse de provisiones, llenar de víveres los almacenes.
Mi Respuesta: Creo que eso es lo de menos. Una hambruna no se nos está presentando para que llenemos nuestros almacenes, alacenas, cajones de la cocina, etc., sino para que pensemos en cómo asegurar de forma realista, la abundancia en el mundo.
Pregunta: Entonces, ¿todos estos mensajes nos llegan para que específicamente lleguemos a esta conclusión?
Respuesta: Seguro. ¿Cómo lo manejaremos? Si hablamos del mundo, entonces necesitamos entender la economía del mundo, el estado del mundo.
Comentario: Apenas puedo entender lo que está pasando en mi casa, en mi economía familiar.
Mi Respuesta: ¡No puedes escapar de esto! Se habla de años y no de que al siguiente mes te falten algunas bebidas.
Pregunta: Usted dice “pensar en la economía mundial”. ¿A quiénes se dirige usted, a los grandes economistas o a cada individuo?
Respuesta: A las personas, absolutamente y en definitiva, directo a ellas.
Pregunta: Entonces ¿qué debo entender cuando constantemente veo reportes de una inminente hambruna?
Respuesta: Están en lo correcto; el mundo está en peligro de hambruna. ¡Un período prolongado de hambruna! ¡Hambruna contínua!
Al punto en que la Biblia nos dice que las madres se comerán a sus bebés, a sus hijos. Así de severo será, nos reducirá a nivel de animales.
Pregunta: ¿Qué debería hacer cuando escuche esto? ¿Por qué necesito todo esto? ¿Por qué se me habla de todo esto?
Respuesta: Para que seriamente te preocupes en cómo evitar esta hambruna y lo que la causa. Entonces, verás que la raíz es solo nuestro terrible desbalance humano y el hecho de que no estamos haciendo lo que deberíamos.
Debemos llegar a un entendimiento mutuo entre nosotros. Necesitamos establecer entre nosotros, vínculos que nos ayuden a alcanzar el equilibrio. Pero no lo estamos haciendo. Al contrario, estamos retrocediendo, queremos pegarle al barco en el que todos estamos. Así que naturalmente, el mundo se dirige a períodos de hambruna, destrucción, etc.
Pregunta: ¿Está en las manos de uno, escuchar esto y cambiar la trayectoria para parar de inmediato?
Respuesta: Lo pueden escuchar, más no alterar. No lo pueden cambiar, porque una cosa es escuchar y aceptar tal eventualidad. Digamos que bombas atómicas y todo lo demás cae del cielo. ¿Y qué? “Si morimos, es en un instante”.
Pregunta: Si usted dice, “Pueden escucharlo, pero no detenerlo”, entonces, ¿Para qué es todo esto? ¿Por qué?
Respuesta: Para que realmente sintamos miedo de modo que sigamos cambiando y por lo tanto cambie el mundo. Esa es la única razón.
Pregunta: ¿Cómo ocurre este cambio? ¿Cuál es el catalizador? ¿Que aparezca algún líder? ¿Que la humanidad comience a gritar?
Respuesta: Debería haber un líder. Sin uno, es difícil hacer el trabajo en nuestro mundo. Debería haber alguien a quien el mundo acepte como su líder y lo siga, alguien que hable sobre la unificación y la forma de superar este período de hambruna. Naturalmente, esto solo funciona si la gente le escucha. Posiblemente el hambre obligará a ello.
Pregunta: ¿Usted aún cree que la hambruna sucederá y los obligará a escuchar?
Respuesta: ¡Indudablemente! Sucederá, pero terminará.
Él llevará a la humanidad al hecho de que después de esta hambre inducida, las personas serán diferentes. Tendrán una actitud distinta hacia la vida, hacia sus valores. Entenderán que lo más importante es sobrevivir y comprenderán ¡para qué sobrevivimos! Es la interrogante más importante. Los Juegos del Hambre: la historia verdadera
Pregunta: Incluso está escrito en la Torá: “El hambre nos obligó a descender a Egipto”. Y hubo hambruna. Después, hubo muchas hambrunas, golpes forzados de hambre, guerras, etc., etc. Tuvo que llevar a la humanidad a la nada. La humanidad no ha aprendido nada.
¿Por qué piensa usted que ahora vamos a entender y a escuchar algo, luego algo cambiará? ¿En qué tiempos estamos viviendo?
Respuesta: Es el período de preparación para el reconocimiento del mal. Nos estamos preparando para alcanzar el mal.
Pregunta: ¿No podíamos haber hecho esto antes?
Respuesta: ¡No!, Incluso ahora, todavía no, pero gradualmente nos estamos aproximando. Sentir el mal, requiere de un enorme sufrimiento, para definirlo, para alcanzarlo y para sacar ciertas conclusiones.
Pregunta: ¿Y siente usted que este es el momento?
Respuesta: No todavía, pero se está acercando.
Pregunta: Entonces, ¿qué conclusiones establece usted, acerca de estar en tal encrucijada? No estuvimos antes ahí, pero ahora, nos dice que aquí estamos. ¿Cuáles son las señales?
Respuesta: Bien, estamos hablando de forma correcta. Ya no nos escondemos detrás de toda suerte de “slogans”, ya no creemos en valores abstractos. Ya hemos desechado todo eso. Solo estamos interesados en una cosa: ¿hay sentido para la vida o no? Si no, digamos que no lo hay, entonces, cómo podemos vivir esta vida en el nivel animal de forma adecuada.
Pregunta: ¿Siente usted que ahora hemos llegado a esto?
Respuesta: Si, hemos llegado.
Sigue en aumento la Crisis alimentaria