Pregunta: Supongamos que unos compañeros han montado un negocio y entre ellos ha tenido lugar un conflicto; no hay acuerdo en la amistad, no hay acuerdo en el negocio. En este caso ¿cómo podemos ayudarles a ponerse de acuerdo, o ellos pueden hacerlo por si mismos?
Respuesta: Pienso que las personas no pueden llegar a un acuerdo por sí mismas. Hay que llegar a un acuerdo ascendiendo por encima de la propia naturaleza de ellos, pero no saben hacerlo.
Por eso necesitan de alguien, como una especie de «arbitro», un especialista que les enseñe y los dirija hacia la correcta combinación integral.
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Del Kab.TV «Secretos Profesionales» del 8 de Febrero del 2013
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