Pregunta: La base del hombre es el ADN, es decir, nuestros genes que determinan todo: nuestra fisiología, inclinaciones e incluso, como dicen ahora, opiniones políticas ¿está de acuerdo?
Respuesta: ¿Cuál es la diferencia si los genes u otras partículas, ondas o elementos determinan nuestras inclinaciones? Por supuesto, hay propiedades establecidas para nosotros, que nos guían y gracias a ellas, distinguimos los caracteres de la gente, sus diferentes enfoques de la vida, etc. Llámalo genes.
Observación: Nuestros genes pueden manifestarse como cualidades que pueden o no pueden cambiar. Por ejemplo, si un niño nace en una familia de egoístas, donde reina el culto al dinero, en principio, no tiene ninguna posibilidad de ser altruista al crecer.
Mi comentario: No, no estoy de acuerdo. Vemos en la naturaleza propiedades opuestas. Nuestro maestro Baal HaSulam escribe que la inversión se observa muy a menudo. Sabemos que en Rusia, los revolucionarios nacieron en familias nobles. Este es el eterno problema de padres e hijos, cuando los hijos van en contra de sus padres. Las propiedades de los padres pueden invertirse en los hijos.
Pregunta: ¿Crees que los rasgos de carácter se pueden cambiar? Supongamos que una persona tiene inclinación a ser tacaña.
Respuesta: No hay necesidad de cambiar nada. Creo que no se puede hacer, porque es la información que está en nosotros, los llamados primeros nueve Sefirot en cada uno, en cada Partzuf, en cada alma. Sólo necesitamos aprender a usarla correctamente.
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De Kabtv «Era post coronavirus» 30/abr/20
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