Michael Laitman, en Quora: “¿Por qué están muriendo tantas personas al tomarse fotografías y selfies?”
En su mayoría, no se dan cuenta del riesgo que toman en el momento de la fotografía o la selfie.
Exponernos ante los demás, en situaciones de riesgo, nos da sensaciones muy notorias de ser especiales y destacar entre la multitud.
De hecho, esas muertes siguen aumentando como testimonio de la realidad, de que el ego humano constantemente crece y cada vez nos ciega más, para considerar las consecuencias de nuestros actos.
Al tomarnos una fotografía o selfie riesgosa, consideramos el triunfo del ego humano: “¡Mírenme!” “¡Vean dónde estoy!”. La fuerza de este impulso del ego, a menudo supera el riesgo que implica tomar la fotografía o selfie. Pensamos en la viralidad de la foto, todas las “vistas”, los “me gusta” y los “compartir” que alcanzaré —y nubla el riesgo del momento. Terminamos pagando con nuestra vida, por ese momento.
Tales situaciones deberían llevarnos a la conclusión de que necesitamos buscar un remedio a nuestro rebasado egoísmo. Corregir nuestro egoísmo, al sobreponernos a él. Desafortunadamente, se desconoce en general, el método para sobreponerse al ego, para evitar que se tengan esos pensamientos y también se equivoquen al conseguir cualquiera de esas habilidades. Como resultado, el sufrimiento se acumula más y más en la humanidad.
Sobreponerse al ego humano, es aprender a controlarlo. No podemos y no deberíamos intentar huir ni minimizar el ego, sino más bien, aprender la forma de relacionarnos adecuadamente con él: tomarlo por las riendas y conducirlo, de forma que nos permita liberarlo gradualmente y en esa proporción, no nos haremos daño nosotros ni a los demás, sino que los beneficiamos. Al hacerlo, nos daremos cuenta de que el ego viene para ayudarnos a sobreponernos a él. Sin embargo, necesitamos un método que nos guíe en esta superación, de lo contrario, seguiremos siendo víctimas de los impulsos del ego.
Basado en “Noticias con el cabalista Dr. Michael Laitman», 11/oct/21. Escrito/editado por estudiantes del cabalista Dr. Michael Laitman.