Pregunta: Usted dice que al final, el destino de todos será bueno. Pero cada uno tiene su propia raíz del alma y el camino de avance es completamente individual ¿cómo puede ser igual el destino de todos?
Respuesta: Lo que es igual es que el esfuerzo específico de cada uno debe ser de acuerdo con su alma, con todas las propiedades que surgen alrededor del alma, para que cada uno realice su potencial, su estado final en el sistema común de Adam. Todo esto está tan interconectado que nadie tiene ninguna preferencia sobre otros.
En el alma común, logramos la corrección absoluta. Por eso, aquel cuyo ego es más grande, su corrección es más difícil y aquel cuyo ego es más pequeño, su corrección parece más fácil, pero en realidad, no lo es. Todo depende de la ayuda que recibe.
Como resultado, cada uno es totalmente adecuado y todos son iguales. Es similar a la estructura del organismos humano. Si es perfecta, ninguna célula tiene preferencia sobre otra. Si remueves una célula, se viola la perfección del organismo entero.
Por lo tanto, en el futuro no debemos siquiera tocar este tópico. Pues, todos son iguales y absolutamente perfectos. Para esforzarnos hacia esta perfección, a cada uno se le dan exactamente las mismas condiciones: mientras más grande el egoísmo, más grandes los requerimientos para su corrección y mientras más pequeño el egoísmo, menos son los requerimientos. Pero en la práctica todos llegan a la perfección total.
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De Kabtv “Fundamentos de Cabalá”, 8/mar/20
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