Cómo pintar el color negro

laitman_2009-06_3382_w[1]El Zóhar:Aunque la esencia del corazón de piedra (Lev HaEven) no puede ser corregida, su color, no obstante, se corrige, pues su color negro está incluido en los tres colores de la santidad (otorgamiento) de las primeras nueve Sefirot y recibe luminiscencia y corrección de ellas. Eso nos permite existir y estar dispuestos para ser discernido en el futuro (en el final de la corrección).

Al aumentar mi deseo de ser semejante al Creador a través de mis acciones, empleando mi deseo (Maljut) para que se asemeje al otorgamiento, percibo las acciones y atributos del Creador en las primeras nueve Sefirot de mi alma. Entretanto, neutralizo y dejo de usar los deseos que pertenecen a Maljut (el corazón de piedra). Y como resultado de este análisis y mi esfuerzo por evitar trabajar en los deseos de Maljut (el corazón de piedra), a Maljut, la invade una tenue luminiscencia.

Después, una vez que me vuelvo totalmente semejante a las primeras nueve Sefirot en mi deseo de otorgar, al corregir mis deseos tanto como es posible y convertirlos a “para el otorgamiento”, descubro que incluso el corazón de piedra puede usarse para el otorgamiento. Descubro que es justamente porque siempre lo rechacé y me distancié de él y no estaba dispuesto a usarlo, que recibí una impresión de otorgamiento. Así, éste llega a incluir en él todas las tonalidades de los colores que usé en las primeras nueve Sefirot.

Solamente hay algunos colores: blanco, rojo, verde y negro y los puedo usar, menos el negro. En vista de que no uso el color negro, los otros colores le permiten incluirlos en sí hasta cierto punto, y como resultado se vuelve apto para ser utilizado. Esto es lo que significa el versículo, “En el futuro el ángel de la muerte, el egoísmo, se convertirá en un ángel santo, en el atributo de amor y otorgamiento”. En otras palabras, al Final de la Corrección la noción de “prohibido” quedará eliminada, ya que tendremos la fuerza de emplear todos nuestros deseos por el bien de los otros.

Entonces todas las restricciones y prohibiciones se desvanecerán en todos los ejes del tiempo, del movimiento y el espacio. Este estado se llama el Mundo del Infinito, un mundo sin límites, en donde mi existencia es ilimitada y tengo un sin fin de posibilidades.

(Extracto de la lección sobre El Libro del Zóhar, correspondiente al 23 de diciembre 2009.)

Material Relacionado:

La corrección del corazón de piedra

Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *