Pregunta: ¿Qué debe uno hacer si durante un taller los problemas materiales lo cubren hasta el punto de no saber cómo escapar de ellos?
Respuesta: Es necesario aclarar cada nuevo estado, sin importar si es positivo o negativo, de manera que la persona pueda pensar para sí misma: «Permanezco en la dirección anterior de pensamientos». Esto es necesario.
No pueden imaginar qué viene sobre ustedes durante el tiempo de la lección de la mañana. Hay 300 o 400 hombres sentados ante ustedes y un gran número de personas conectadas por Internet. ¡Si yo no tuviera éxito al organizar mis pensamientos, entonces no se sabe qué podría haber sucedido en la lección, qué podría haberles pasado a mis alumnos, qué desperdicio, qué lío habría!
Los pensamientos pueden ser diferentes: A veces estúpidos, a veces confusos, a veces aterradores, como en una película de horror. Puede ser que estén completamente fuera de lugar: sobre los problemas en casa, con los niños, problemas relacionados con el sexo. ¡Cualquier cosa es posible! Estos no dependen de la edad o de los diversos factores. Todos estos pensamientos nos los envían para que nosotros los procesemos.
Yo no puedo pensar en controlarme yo mismo o a ustedes. Ustedes, después de todo, están en el comienzo del camino.
Si yo no controlo mis pensamientos, entonces mi lección no valdrá nada. En vez de elevar a los estudiantes, yo los rebajo, dado que ellos lo reciben todo a través de mí. Esa es la responsabilidad del moderador.
Imaginen que ustedes son el cuerpo de una madre y dentro de él está desarrollándose un embrión, lo más valioso para ustedes. ¿Permitirían que recibiera alimento dañino o incorrecto? Por lo tanto, todos los estados experimentados deben ser controlados.
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De la Convención en Sochi del 6/10/14, Lección 3