Pregunta:
Durante las clases, ¿trata de no hacer dibujos para que los alumnos no se acostumbren a ellos?
Respuesta:
Sí. Si dibujo un círculo o una línea, al mismo tiempo explico que es tal o cual cualidad y que la dirección de las líneas a la derecha, izquierda, arriba y abajo representan cualidades espirituales y así sucesivamente.
Sin embargo, es muy difícil para las personas alejarse de la percepción visual. Todavía representan nuestro mundo y el mundo superior con los mismos medios de expresión y tenemos que alejarnos gradualmente de las imágenes. Hago muchos menos dibujos ahora que antes.
En el mundo espiritual donde hay una gran cantidad de palabras para introducir a las personas en un determinado estado, similar al espiritual, sobre el cual se les quiere hablar para que puedan sentir a veces es necesario un dibujo. Por ejemplo, el Arí dibujó el “Árbol de la Vida” – “ Sefer Ha Eilan ” (“ Eilan ” es un árbol, “El Libro de un Árbol”).
Mi maestro Rabash no dibujaba nada. Durante los últimos 12 o 13 años de su vida estuve a su lado y me parece que probablemente lo asusté con mis dibujos.
Cuando empecé a estudiar Cabalá, representé todo en dibujos: círculos, líneas y varias relaciones, no tuve la oportunidad de hacer la pregunta correcta y quería que entendiera mi pregunta del dibujo. ¿Es así o no y explica por qué?
Le amontoné tantos dibujos, especialmente sobre el mundo del Infinito —círculos uno dentro del otro, superpuestos, conjugados— que lo asustó. Dibujé mucho, según el texto y no quería. Cuando lo vio y se dio cuenta de que estaba haciendo preguntas de esa manera, dijo: “Aprenderemos de una manera diferente”.
Pero no dejé de dibujar, simplemente no le mostré nada más. Dibujé para mí porque el dibujo expresa estados muy específicos y condicionalmente puedes expresar cualquier cosa en él, si lo entiendes claramente y lo internalizas.
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