Pregunta: ¿Por qué el Creador abrió una brecha tan grande entre Él y la creación y provocó que ésta se sintiera tan distante?
Respuesta: El Creador hizo con nosotros lo que nosotros hacemos con nuestros hijos. Primero les dejamos avanzar ayudándoles desde atrás y queremos que sigan caminando. Todo esto se refleja en nuestra naturaleza.
El Creador lo hizo por amor absoluto. A pesar de nuestra inclinación a dedicarnos solo a utilizarnos y comernos los unos a los otros en nuestro mundo egoísta, de repente aparece la fuerza de la mutualidad, la participación, la empatía y el amor en los distintos niveles de la naturaleza. Por eso existe aquí la posibilidad de la vida.
La fuerza egoísta por sí sola no podría existir de forma independiente. Cuando se tiene el egoísmo de dos tipos, entonces viene la posibilidad de existencia en el nivel mínimo. Con este enfoque se pueden hacer algunas aproximaciones, imaginando cómo sería si yo amara o deseara desinteresadamente algo para otro. En otras palabras, aquí hay un lugar para la expresión de las concepciones morales para la imaginación. Aunque también es egoísta, sigue existiendo.
Algunas combinaciones interesantes entre el egoísmo y la propiedad de otorgar se produjeron como resultado de la ruptura de los deseos en el mundo superior y su descenso a nuestro mundo. Todos quieren solo recibir, pero aun así aparece en ellos una pequeña propiedad de otorgamiento. Esta propiedad está bajo el control de la persona y uno siente un placer egoísta especial en ella.
Por ejemplo, cuando las personas se dan mutuamente, lo disfrutan. El amor entre ellos es un placer egoísta, pero con él una persona da algo al otro y así se satisface con recibir placer. En definitiva, es el mismo egoísmo, pero un egoísmo ya mediado por el movimiento de alejamiento de uno mismo.
Este es un sistema muy interesante por sí mismo. Los científicos no lo han investigado en profundidad. Todavía no pueden descifrarlo, y creo que en general no tendrán tiempo ni podrán llegar a él. Al fin y al cabo, empezaremos a revelar el mundo superior y a través de él empezaremos a conocer nuestro mundo en lugar de hacerlo a partir de nuestros pinchazos en la Tierra. Este es un proceso muy intenso e innecesario. Solo a través del mundo superior es posible conocer el inferior. Así es como se hace: rápido, específico y de forma completa.
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