El estado de paz entre marido y mujer

“Un hombre y una mujer, si son recompensados, la Shejiná (Divinidad) está entre ellos”. Deberíamos preguntarnos: Si son opuestos, ¿Cómo puede haber paz entre ellos?

 

Es específicamente cuando uno se vuelve digno, cuando invierte recepción en otorgamiento, llamado “recibir para otorgar”, que hay paz entre ellos. De lo contrario, están en disputa o que uno cede antes que el otro. Ceder no se considera amor en plenitud, porque quien cede siempre espera recuperar el poder del control (Rabash, “Discernimientos en los Estados” – Artículo 240).

 

El estado de paz entre marido y mujer, que luchan juntos por construir algo común, no consiste en uno más uno, es un todo único. Este estado se llama “Divinidad” ya que en él reside el Creador.

 

Se alcanza un todo común cuando cada cónyuge sintoniza completamente con el otro y comprenden que forman una entidad unificada que nunca existen por separado.

Pregunta

¿Entonces ni siquiera debería considerarme una categoría separada?

Respuesta:

¡Nunca! Es un sentimiento interno para ambos, no hay nada sin el otro, ni cada uno por separado, y cuando se reúnen de esta manera, en esta unidad, sienten la presencia del Creador.

Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *