Comentario: Supuestamente, en el otoño de 1943 un destructor de la Armada estadounidense se hizo invisible y se teletransportó desde Filadelfia, Pensilvania, a Norfolk, Virginia, en un incidente conocido como el Experimento Filadelfia. Los militares estadounidenses refutan este incidente. La leyenda urbana sostiene que enormes campos electromagnéticos, que si se configuran correctamente, harían que las ondas de luz y radio pasaran por alto el destructor y la nave desapareciera.
Si podemos confiar en alguna información, este experimento se basa en “la teoría del campo unificado” de Einstein. Según su íntimo amigo y colega, el Dr. Russell, Einstein terminó, no obstante, la “teoría del campo unificado”, pero afirmó que la gente no estaba preparada para ella y que solo maduraría tras el final de la Tercera Guerra Mundial.
¿Es necesario esperar a la Tercera Guerra Mundial para revelar a la humanidad esta ley del “campo unificado”?
Mi respuesta: Probablemente, sí. Tal vez enseñe algo a la humanidad. Pero por supuesto, no soy partidario de un desarrollo tan dramático de los acontecimientos y de los experimentos agudos.
De hecho, Einstein realizó experimentos con el “Eldridge” y el campo luminoso, cuando los objetos desaparecen ante nuestros ojos. Ellas mismas no desaparecen, sino que solo desaparecen de nuestra vista. Sin embargo, ¿qué significa que “desaparezca o no del exterior”? ¿Qué tenemos además de la vista?
Todos estos experimentos son muy fuertes, grandes y geniales. Einstein, por supuesto, reveló muchas cosas y todavía no conocemos muchas otras. Esto se desprende de sus declaraciones.
De todo esto, podemos decir que la humanidad debe recibir un garrote o una honda de acuerdo con el nivel en que se encuentre. Por supuesto, los métodos de exterminio de los que disponemos hoy en día no nos permiten dormir tranquilos. Sería mejor que nuestros vecinos tuvieran garrotes y hondas. Seríamos capaces de enfrentarnos a ellos. Pero con lo que tenemos hoy…
En efecto, es posible que una tercera guerra mundial esté por delante de nosotros. Einstein tenía razón al afirmar que, sin un reconocimiento claro del sufrimiento, es decir, sin comprender de dónde procede, la humanidad no crecerá.
Según la Cábala, no sólo puede ocurrir una tercera, sino también una cuarta guerra mundial. Imagina que incluso después de la tercera todavía quedará algo y la cuarta también es posible.
Sin embargo, existe la posibilidad de llegar a la corrección de otra manera.
Una guerra mundial en sí misma no nos dará nada. Si pasa tanto sobre nosotros como sobre los animales, entonces los animales sufren y mueren. La humanidad, sin embargo, debe darse cuenta de que está sufriendo porque tiene la cualidad egoísta, que de ninguna manera le permitirá existir normalmente ni aquí ni en ninguna otra condición.
Es necesario llevar a una persona a tal estado. Esperamos poder hacerlo a través de la difusión de la sabiduría de la Cábala.
La Cábala explica a la humanidad el sentido de la vida, el sentido de la naturaleza, una clara ley de interconexión global. De ellos se deduce que solo necesitamos una cosa: alcanzar un equilibrio absoluto entre nosotros y la naturaleza. Esta es la ley básica de la naturaleza: la ley de la homeostasis. Solo entonces viviremos con comodidad y seguridad.
Cuando alcanzamos ese equilibrio, empezamos a sentir el poder interior de la naturaleza, una salida a otro nivel de ella, y a ver que nuestra vida es perfecta y eterna. ¡Eterna!
Es decir, el ascenso por encima del nivel del tiempo y de la muerte es lo que Einstein supuso en su experimento, pero no quiso mostrarlo a la humanidad porque la gente utilizaría estas fuerzas completamente desde el otro lado, el egoísta.
Para llegar a la utilización correcta de las fuerzas que comprometió en el Experimento Filadelfia, es necesario madurar. Por lo tanto, dijo que después de la Tercera Guerra Mundial sería posible revelar algo a los egoístas superficiales, pero no antes.
Esperamos que primero les presentemos un conocimiento general sobre la naturaleza, sobre lo que realmente podemos revelar si nos unimos unos con otros, y entonces la humanidad tendrá una perspectiva, que es, la eternidad, la perfección, la armonía, y el conocimiento de cómo llegar a esto a través de la conexión con los demás.
Hoy en día, ya estamos muy cerca de empezar a entenderlo.
Espero que, después de todo, sin una Tercera Guerra Mundial, llevemos a la humanidad a un estado en el que podamos darle la idea de existir por encima del tiempo y el espacio, algo que Einstein quiso confirmar con el Experimento Filadelfia.
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