Dr. Michael Laitman en conversación con Oren Levi y Tal Mandelbaum Ben Moshe
¿Cuál es la conexión entre la condición física de una persona y su condición espiritual y su grado de felicidad? ¿Cómo se define el sentimiento de felicidad? ¿Qué se considera salud?
Es cierto que el estado del cuerpo influye en la felicidad, pero estar sano tampoco hace feliz a una persona. Ciertamente, por debajo de un determinado nivel de salud, el cuerpo molesta y perturba constantemente tu felicidad. Sin embargo, las personas con discapacidad a veces son más felices que otras. Vale la pena que una persona aprenda a luchar por lo que puede lograr y renunciar a lo que está más allá de sus posibilidades.
El propósito de la vida es ser feliz, no preocuparse por el cuerpo, por lo tanto, es necesario preocuparse de que el cuerpo no interfiera, una clase de niños discapacitados juegan juntos y están muy felices. Cuando todos están juntos, las limitaciones no interfieren.
La salud mental de una persona depende en gran medida del entorno, la ayuda mutua trae felicidad, en el futuro alcanzaremos un buen estado de salud física, pero seremos menos felices. Escuchar a tu cuerpo tampoco te traerá verdadera felicidad; Incluso la relajación máxima es temporal, un equilibrio entre el individuo y la sociedad según un estándar uniforme, como se intentó en China y Rusia, no trae felicidad.
La felicidad es el sentimiento de satisfacción al realizarte a ti mismo, la felicidad se siente cuando hay algo más elevado que tienes en la vida, algo por lo que sientes que vale la pena vivir. Las drogas no traen felicidad, no tienen en ellos ningún sentido de la realidad de la vida, de alcanzar la esencia de la vida, es en situaciones de enfermedad extrema que una persona tiene la oportunidad de reconocer el poder que está gestionando su vida, una persona que trasciende el egoísmo estrecho descubrirá las fuerzas que actúan sobre nosotros y pueden crear equilibrio en su vida.
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