Pregunta:¿Qué dice la sabiduría de la Cabalá acerca de cómo debemos trabajar con nuestro placer y nuestro deseo para que uno no extinga al otro?
Respuesta: La sabiduría de la Cabalá nos habla de cómo actuar con intención de otorgar a otros y no en nuestro beneficio, es decir, que disfruto de dar placer a otros. “Otros” es un deseo infinito, externo a mí. Si transmito el placer a través de mi, fluye y me llena, pero no extingue el deseo, porque el placer debe ser transmitido. Por tanto, podemos decir que entre yo y el placer, existe otra persona. Yo, como Partzuf superior en términos cabalísticos, tomo el placer y lo paso a otro. Si estamos juntos en una red y recibimos de todos y lo pasamos a todos, al mismo tiempo recibimos todo y lo transmitimos todo, por lo tanto es un flujo infinito y eterno de placer absoluto.
Esta es la fórmula del placer eterno -disfrutar en beneficio de otro. Es totalmente lógico y en realidad, podemos entenderlo, pero tenemos que hacerlo para que funcione.
Pregunta: ¿Podemos ilustrar esta idea con ejemplos de este mundo?
Respuesta: Es imposible dar ejemplos a alguien que no distingue entre los atributos de otorgamiento y recepción. Sólo podemos ver esos atributos dentro de nosotros. No están ocultos, pero depende de la intensidad del deseo general de la humanidad, que aún no siente esa necesidad real y aún no está preparada para adquirir el perfecto placer eterno del otorgamiento. Existen muy pocas personas que quieren aprender a otorgar. Es la forma de recibir placer enorme.
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De la lección de Cabalá en ruso 28/ago/16
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