Una persona siempre piensa que es justa. Espera que únicamente le sucedan cosas buenas y nunca cosas desagradables. Hoy en día toda la humanidad percibe la vida de esta forma. El mundo va sufriendo una crisis tras otra, nos agobian cada vez mayores problemas, pero nadie se detiene a considerar que tal vez exista un propósito. Todos piensan que los acontecimientos son accidentales.
En otras palabras no estamos aprendiendo de nuestra experiencia. No estamos tomando consciencia de que somos la misma razón de todo lo que sucede.
En nuestro estado actual este problema se revela cada vez más vivamente: a partir de este punto, el único camino para progresar es unirnos como uno solo.
Y lo anterior únicamente es posible atrayendo la Fuerza Superior – el Creador. Por eso es tan importante diseminar el conocimiento que permita utilizar esta fuerza superior de la Naturaleza. Solamente entonces podrá cada persona aprender sobre lo bueno que tiene lo que parece ser malo.
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