Tomando constantemente de la naturaleza – enfoque cabalístico

Durante miles de años la naturaleza siempre ha estado dando, pero nosotros hemos evolucionado como seres egoístas tomando constantemente. Y esto es normal, ya que según el programa de la naturaleza, se suponía que debíamos ser así y desarrollarnos egoístamente. 

 

Es como un niño en crecimiento al que alimentas y le das todo, se desarrolla egoístamente, y estás satisfecho con ello. Y entonces crece, y de repente le dices: «¡Ya está! Ahora vete a trabajar, paga por ti mismo, hazlo todo por ti mismo y asume tu responsabilidad. Y mira, si haces algo mal, serás castigado». 

 

En eso estamos hoy: nos desarrollamos y nos desenvolvemos como niños pequeños, y luego llegamos a la edad adulta, el mundo se ha encogido, se ha hecho global e integral, y eso nos obliga a ser adultos. Ser adultos significa estar en la conexión correcta con los demás. 

 

Igual que un adulto de 20 a 25 años empieza a trabajar, a construirse a sí mismo, su casa, y a conectar con el mundo como un hacedor, ahora la humanidad ha alcanzado de forma similar la edad en la que se ha convertido en adulta. 

 

Ahora se nos muestra nuestro lugar de trabajo. Debemos conectarnos entre nosotros y construir una nueva sociedad que no sea como la de antes. 

 

Antes, crecimos egoístamente durante miles de años, y ahora debemos conectarnos unos con otros según la ley de la garantía mutua, la responsabilidad mutua y las concesiones mutuas. ¿No quieres? Recibirás golpes de la naturaleza porque no te ajustas a ella. Aquí es donde estamos ahora; nos estamos convirtiendo en adultos. 

 

Comprendo que no queramos esto. ¿Quién lo quiere? Cuando soy niño, no hay reclamos contra mí. Cuando me portaba mal, rompía algo o jugaba, me trataban como a un niño. Pero cuando me convierto en adulto, eso me obliga. Pero aún no nos damos cuenta de ello. 

 

Nos resistimos y nos oponemos; queremos jugar con algunos juguetes. Miro a estas personas supuestamente fuertes, grandes y sabias del mundo, y son como niños en un cajón de arena que no quieren salir de él aunque ya hayan superado su edad.

 

Cuando les dices esto, se ofenden y piensan que eres una persona poco realista: «¡Mira qué mundo! Puedes jugar en él todo lo que quieras: ¡bolsa, dinero, coches, vino, películas! ¿Y qué estás sugiriendo aquí? ¡Eso no es lo que queremos en absoluto! Ser responsable de algo: ¿para qué lo necesitamos? Ya tenemos suficientes juguetitos a nuestro alrededor y no necesitamos nada más». 

 

Este es un gran problema. Pero aún así, tendremos que salir del cajón de arena. 

 

Saber más  Es difícil ser adulto

 

Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *