Reportaje: (de Daily Galaxy): «Se ha descubierto que el ADN tiene propiedades telepáticas ‘imposibles’» Los científicos reportan evidencias que, contrariamente a nuestras actuales creencias sobre lo que es posible, la doble cadena de ADN intacta tiene la «sorprendente» habilidad de reconocer similitudes en otras cadenas de ADN a distancia. De alguna forma pueden identificarse una con otra y los pedacitos de material genético tienden a congregarse con ADN similares.
El reconocimiento de secuencias similares en las subunidades químicas del ADN ocurre de una manera desconocida para la ciencia. No se sabe la razón por la cual el ADN puede combinarse como lo hace y desde un punto de vista teórico actual esta hazaña debería ser químicamente imposible.
Mi comentario: Las fuerzas de unidad (otorgamiento, amor y responsabilidad mutua) llegan del siguiente nivel «intelectual» más elevado que el nivel de los elementos egoístas que unen. Por ejemplo, cada célula y órgano de nuestros cuerpos es egoísta, pero al unirse, cada una anula su egoísmo y adquiere el atributo de otorgamiento total e interacción mutua. De esta forma ascienden al siguiente grado de existencia: un cuerpo vivo y en desarrollo.
La naturaleza de la atracción consiste en reconocer aquellos que son similares a uno, según la ley de equilibrio (homeostasis), o la ley de semejanza. Dos elementos opuestos – sean células u otras estructuras – se atraen mutuamente conforme al programa para la creación de una existencia mutua más elevada. Esta es la conexión entre todas las partes del universo, incluyendo todos los mundos espirituales. Cualquier conexión conduce a la asimilación de los siguientes niveles de existencia.
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