La Torá, «Éxodo», 28:2: Harás atuendos sagrados para tu hermano Aarón, para honor y gloria.
El atuendo (Levush) simboliza la corrección que tiene que hacerse en los deseos de la persona. Si tengo deseos egoístas, diversos deseos que son fuertes o incluso deseos más débiles, tenemos que vestirlos a todos, lo cual significa vestirlos con la intención por el bien de otros, por el Creador.
Mientras más claro, agresivo, y serio sea el deseo, más grandes son las correcciones por las que debe pasar, lo cual significa «atuendos de esplendor». Por lo tanto la corrección no corregida, Aarón, es la peor.
Se nos dice: «Cuando Israel cae, cae más bajo que cualquier nación en el mundo, y cuando ascienden, ascienden todo el camino hasta el Cielo». La razón es que es posible con un deseo egoísta gigante en su forma revisada hacer algo todo el camino hasta el nivel del Creador. Entonces todos serán impresionados por su esplendor, porque es imposible comparar la corrección que cualquier nación ordinaria tiene que hacer, con los deseos ordinarios que tienen las personas.
Así Moisés y después los hijos de Aarón y después los otros sacerdotes son los más claros, los más desagradables deseos egoístas que puede haber si no son corregidos. Entonces vemos la actitud de la humanidad hacia los judíos, y en los estados corregidos será lo opuesto. Entonces las naciones del mundo están esperando a que los judíos adquiramos vestimentas, que ascendamos y comencemos a trabajar con el fin de otorgar con todos nuestros atributos especiales.
Por lo tanto la «vestimenta de Aarón» no es un concepto simple ¿Qué distingue en realidad a las personas en nuestro mundo? Son sus ropas. Pueden ser ropas, una casa, lo que sea que rodee a la persona, lo que indique su nivel, su estado, su ascenso por encima de los otros, o su descenso. Esto significa que es una expresión de estatus, del estado de la persona.
Pregunta: ¿Aparentemente la moda moderna tiene raíces muy poderosas?
Respuesta: Por supuesto, surge de la misma naturaleza. El ego usa este medio para su ascenso.
En el mundo espiritual, las ropas enfatizan el ascenso interno de la persona por encima del mundo; el nivel de mi otorgamiento, amor y auto anulación. Según el grado en que ustedes se anulan, también ascienden. En nuestro mundo sin embargo es lo opuesto, es el grado hasta el cual se decoran frente al espejo como un mono.
Esto continuará hasta que entendamos que las ropas son la expresión interna de la persona. El hecho de que vistamos ropas elegantes no es una corrección sino lo opuesto, una distorsión.
Tras el pecado del árbol del conocimiento, el Creador le dijo a Adam que él necesita ponerse ropas, lo cual significa que tiene que corregir su ego para que le ayude a superarse a sí mismo y alcanzar el amor y el otorgamiento. La Torá dice que el Creador cosió esas ropas para él, lo cual significa que Él les dio la Luz Superior mediante la cual la Luz que Retorna, que significa la intención con el fin de otorgar, fue investida en el ego.
(125968)
Del Kab.TV «Los secretos del Libro Eterno» del 8/19/13