Torá, Deuteronomio 12:3: Hagan trizas sus altares, hagan pedazos los monumentos y quemen a fuego sus árboles. Derriben las imágenes grabadas de sus dioses y borren por completo sus nombres de aquel lugar.
Las “Imágenes de dioses” están dentro de mí. Es lo que imagino como objetivo, a lo que rindo culto, dándole importancia. Por lo tanto, necesitan ser destruidas totalmente.
Todos son puntos de referencia con los cuales tengo un lugar hacia dónde dirigirme. Debo hacerlo, lograrlo y realizarlo. Sin embargo, cuando establezco una sola meta para mí y todas mis aspiraciones están dirigidas sólo a lograrla, entonces todo lo demás debe ser destruido.
Está escrito acerca de esto: “Derriben las imágenes grabadas de sus dioses”.
Pregunta: ¿Esos dioses son nuestros sueldos, carreras, fondos de pensión, etc.?
Respuesta: No, lo esencial para la existencia física debe permanecer. Debe pensar en eso y, por todos los medios, proveer para sí y no caer en manos de la sociedad. Todo lo demás lo debe dar para el logro de la meta común.
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De Kabtv “Secretos del Libro Eterno” 22/jun/16
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