Agente especial

 No sé cómo se protege el agente.

En Cabalá, es muy simple. Si una persona no quiere, entonces no experimenta ninguna presión del entorno porque el entorno espiritual no es natural para ella.

Llegas a un grupo en el que tienes que hacer un esfuerzo para estar conectado con él porque aquí todo el mundo habla de amor, de amistad, de elevarse por encima de su egoísmo y acercarse a los demás. Esto va en contra de tu naturaleza innata; no hay necesidad de entrenar agentes de inteligencia.

Aquí vienes por ti mismo como un elemento externo, y tienes que trabajar en ti mismo durante mucho tiempo si quieres infiltrarte en este entorno. Te muestra abiertamente lo que tiene. Si quieres, puedes infiltrarte en él.

Si te quedas en el grupo como un extraño, nunca entenderás nada. En cuanto te conviertas en un elemento similar a este grupo, entonces podrás comprender lo que ocurre en él. Pero entonces será demasiado tarde porque ya te habrás vuelto diferente.

Aquí no hay juegos externos. No puedes comportarte exteriormente como un artista, pero internamente seguir siendo el mismo elemento extraño. No se puede. O lo uno o lo otro. Tienes que cambiar tu naturaleza.

Por eso, en nuestro mundo, un agente puede seguir siendo, por ejemplo, un comunista convencido en una sociedad capitalista. Pero aquí no; de lo contrario, no podrá obtener ninguna información cabalística.

Pero incluso si la obtiene, no podrá contarla a sus amos porque ellos no entenderán nada al respecto, y no la necesitan. En nuestro mundo egoísta, nadie está interesado en cómo ser amable y bueno, y amar a otras personas.

Por lo tanto, la Cabalá es la ciencia más innecesaria para nuestro mundo. Pero es necesaria precisamente para elevar nuestro mundo. Desde este punto de vista, es la más necesaria.