Pregunta: ¿Constituye la familia un sistema cerrado? ¿Cómo es posible usar correctamente la tensión que esta crea?
Respuesta: Hoy en día, la familia se eleva del nivel animal hacia el nivel humano. Si la gente entiende esto, entonces entenderá la necesidad de crear un tipo de familia completamente nuevo que entre en contacto con los demás, y en esto crea una correcta célula familiar integral. Esta célula no está basada en conexiones animales, tampoco en el dinero compartido, ni siquiera en los niños, ya que estas instituciones y sistemas fueron creados con este propósito, las cuales en principio toman todo esto sobre sí mismas.
Hoy, dentro de una familia, la gente no es capaz de permanecer junta ya que las parejas no están vinculadas mutuamente de ninguna forma desde si nivel interno compartido. El nivel anterior permanece muy atrás: Ya no somos materialmente dependientes uno del otro, no tenemos que estar juntos, yo no estoy atado a la familia u hogar, ni a los niños, ni a la religión, ni a mí pueblo, ni a mi trabajo, etc. Hoy la persona es libre: Ella compra un boleto, y vuela a algún lugar, y té ni siquiera sabes hacia donde. Ella puede desaparecer hasta el fin de la vida en algún rincón del mundo. ¡Quién sabe!
En Moscú existe un popular programa de TV llamado, «Estoy Buscándote» en el que la gente se busca entre sí. Esto es, en principio, la llamada de los tiempos. La gente desaparece, se aleja, y ¡ni siquiera intentan dar noticias de sí mismos! La persona encuentra algo completamente diferente, y ella como si en realidad lo hiciera, descubre una nueva vida.
Debemos entender que la familia se elevó desde el nivel animal hasta el humano. Si estuviéramos en ese nivel, no habría razón para que ellos estuvieran juntos, se comprometieran, se conectaran. Ellos no ven el beneficio o el provecho de esto y no ven que forma de espiritualidad necesitan crear entre ellos o como dar nacimiento a los niños espirituales y no a los físicos, que necesitan crear la misma célula que será llamada «familia espiritual«, y no solo una célula que está conectada para compartir una propiedad, un departamento, o un carro, etc. Si no traemos a la persona a esto, entonces no habrá una familia. ¡Esto es absolutamente preciso!
Ahora necesitamos enseñarle a la gente a crear una familia espiritual, es decir a estar conectados mutuamente al siguiente nivel, no al nivel corporal, donde cada persona puede arreglárselas por sí misma.
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De una «Charla Sobre Formación Integral» del 7 de Agosto del 2012
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