Pregunta: Nosotros experimentamos miles de variados estados. ¿Cuán importante es guardar la pista o grabarlos para poder así pasar cada estado de manera consiente?
Respuesta: Es una muy buena pregunta. Muy al principio de mi sendero yo le hice a mi maestro la misma pregunta: ¿Debo guardar una pista de todos mis estados? “Ahora, siento y veo a otros de esta manera” ¿Me ayudaría si escribo cada estado en el que estoy: yo, mi parecer y el de otros, que tanto entiendo, estoy consciente de mi mismo en este mundo y del mundo mismo? ¿Debería establecer, digamos diez facetas y tratar de revisarlas una vez al día o una vez cada cierto tiempo de ser posible (dependiendo de cómo cambien mis estados)?
Mi maestro me dijo que vale la pena hacerlo en la primera etapa. Esto ayuda a una persona. Por ejemplo, veo hacia atrás y veo que ya pasé por algo similar, y que no pasó nada terrible: Salí de esto. O utilizo los registros para futuras referencias.
¿Qué tanto ayuda en sí este asenso? Es imposible revivir todos los detalles del pasado, no importa que. Después de todo, ahora estás viviendo el próximo estado y no puedes sentir como si estuvieras en el pasado. Tú no lo entiendes, como si lo fueras; esta es una persona completamente diferente.
Nosotros descendemos desde arriba hacia abajo a lo largo de 125 grados espirituales, y quedamos habitados por cientos de miles de Reshimót (registros informativos). Cada Reshimó es un estado espiritual que contiene todos los mundos, universos y todo lo que hay como un todo.
Así, cuando esta Reshimó trabaja en mí, puedo sentir y pensar solo lo que está establecido. Una Reshimó se va, y a mí me gusta presionar el botón de “borrar”, no sé ni entiendo nada. Una nueva Reshimó llega y yo actuó de acuerdo con ella.
Somos un sistema que constantemente experimenta una Reshimó, un gen de información, el cual se desarrolla en él. Estamos viviendo por este gen. La secuencia de tales genes nos da la sensación de vida, fluidez, movimiento.
Por lo tanto, estar hoy en un estado y leer acerca de los estados en los que estuviste hace una o dos semanas, probablemente no los entenderás todos, ya que no los estás viviendo ahora mismo. Inténtalo y ve por ti mismo. Pero aun así es útil, por lo menos podrás entender que ni tú mismo puedes entenderte.
(34148 – De la Lección 2, Convención de Berlín del 28 de Enero del 2011)