Pregunta: Una convención en el desierto de la Aravá se llevará a cabo este fin de semana, al cual asistirán varios cientos de hombres de Israel para unirse, para cristalizar la fuerza interna de la garantía mutua entre nosotros, y para convertirse en el núcleo de la unificación en la convención de diciembre. ¿Cómo podemos hacer esto?
Respuesta: En efecto, tiene que haber un núcleo interno especial en el que todos los puntos se reúnan en uno solo. Este punto está rodeado por una parte, la más pasiva, las mujeres de Bnei Baruj y el más amplio círculo es el mundo exterior.
En el interior, todos nuestros amigos de todo el mundo se fusionan. ¿Por qué los hombres? Porque esa es la naturaleza de la creación: Ellos son los que necesitan corrección para alcanzar el amor y la unidad, mientras que las mujeres llegan a esto de manera diferente. Entonces, cuando alcancemos el estado deseado, seremos capaces de transmitirlo a los demás.
Pregunta: ¿Cómo pueden las mujeres apoyar a los hombres en esta convención?
Respuesta: Ellas tienen que pensar en nuestro éxito. Necesitamos ese apoyo ya que sin este, tendremos un tiempo muy duro. Es exactamente lo mismo que cuando «los hijos de Israel salieron de Egipto en virtud de las mujeres justas».
Las mujeres son una parte muy poderosa del sistema común y su apoyo es simplemente indispensable. Cuando una mujer se preocupa por un hombre, esto le da grandes fuerzas, un gran impulso para realizar sus anhelos. Sin el apoyo de las mujeres, no tendremos éxito.
(60933 – De la 4º parte de la lección diaria de Cabalá del 11/16/11, «Arvut» (Garantía mutua)