A lo largo de nuestro camino espiritual distinguimos entre dos partes: la parte que avanza hacia el atributo de amor y otorgamiento, hacia el Creador, el contacto, la conexión y la adhesión con todos, y la parte que se opone, la que constantemente quiere tomar para sí mismo.
Cuando estoy entre estos dos estados, debo examinarme constantemente y chequearme a mí mismo si no estoy robando en la corporalidad o en la espiritualidad, si estoy haciendo algo mal en mi mente o mis sentimientos con el fin de beneficiarme personalmente de eso. Aquí es donde está el problema. En primer lugar, no debo recibir ningún beneficio, incluso si tengo tales beneficios, todos debemos estar de acuerdo con que estos son parte de mi trabajo. Supongamos que yo necesito un coche para visitar los sitios de construcción o que necesito ayudantes en mi trabajo y algunas personas deben ser asignadas para este trabajo.En ese caso, todo debe estar abierto y claro para todos, sin duda.
En total, nos muestran una sociedad corregida que debemos construir. Cada miembro de la sociedad debe recibir sólo lo que merece y necesita para su existencia, y darle todo lo demás a la sociedad. Esto se conoce como el nivel de Moisés, que es un ejemplo para todos los demás.
Siempre hay este tipo de problemas en el trabajo espiritual de una persona, y lo podemos ver a través de la historia, incluso en los días del templo cuando la gente vivía en un nivel espiritual. Siempre ha habido problemas serios, pero estaban en un nivel espiritual a pesar de que estén descritos en un lenguaje corporal.
Pregunta: Así que aquí debemos tener en cuenta que cuando estamos construyendo la espiritualidad, no deberíamos tener «bolsillos».
Respuesta: En aquellos tiempos, ese fue el caso en el nivel corporal. Por lo general, entendemos que si alguien quiere robar, nadie puede detenerlo. Sin embargo, nadie es tan tonto como para poner un pedazo de oro en su bolsillo.
La persona no debe tener deseos con el fin de recibir, lo que significa un lugar donde quiere recibir para sí mismo. El Masaj (pantalla) debe ser sólo con el fin de otorgar. Se trata solamente de otorgamiento. Este es el nivel de Moisés.
Parece complicado cuando leemos sobre esto, pero es fácil cuando estamos en el entorno adecuado. Entonces no hay problemas. El entorno nos proporciona el nivel adecuado y el apoyo por el cual flotamos como si estuviéramos en el aire.
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De KabTV «Secretos del Libro Eterno» 16/10/13