Lo más importante es que todos y cada uno se anulen totalmente y nadie piense en sí mismo, como el justo que no se cuenta para nada entre los amigos. Sólo debe ver que sus acciones no mancillen a la sociedad. Aun cuando parece que es una gran persona, debe observar sus acciones y pensar: “¿Qué me hace grande?” y anularse completamente.
Se sabe que en cada decena está la Shejiná [Divinidad] y este es un nivel completo. En un nivel así, hay cabeza, manos, piernas y talones. Se concluye que cuando cada uno siente que no es nada en la sociedad, se considera talón comparado con la sociedad, mientras que ellos son la cabeza, el cuerpo y los órganos superiores. Cuando cada uno piensa así de sí mismo, abren las puertas de abundancia y toda la abundancia en el mundo se abre para ellos. (Maor VaShemesh, “Ekev”).
Si todos se anulan ante otros, cada uno hacia el grupo, crean condiciones para la revelación del Creador. Así debemos actuar.
Pues, al anularte ante los demás, aprendes de ellos, los observas, los inspiras, creas una condición donde el Creador es revelado dentro de ustedes. Él no será revelado en un individuo, sino en la actitud de cada unos hacia el grupo y sólo cuando esta actitud es correcta.
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Del congreso internacional de Cabalá “Nos elevamos por encima de nosotros mismos” 7/ene/22, “Anularse ante los amigos”, clase 2
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