Recibí una pregunta: ¿Por qué el Creador está llevando al mundo a un irrevocable estado que no puede manejar?
Mi respuesta: El reconocimiento del mal tiene que llegar precisamente desde este estado. El hombre no podrá abandonar su estado actual y lo considerará normal hasta que empiece a recibir «golpes» que ya no pueda manejar dentro de su egoísmo. Se dará cuenta de ello y clamará, «¡Ya basta!»
Usted es testigo de que la gente continúa lanzando su dinero al horno de los bancos y los fondos como si no estuvieran pensando para nada. El dinero sigue desapareciendo, pero la farsa sigue y sigue.
Por lo tanto, nada de esto servirá, excepto la corrección de la sociedad misma. Pero, ¿qué es justamente lo que se debe corregir? La conexión global entre nosotros y esta conexión debe incluir a toda la humanidad. A menos que lo hagamos, ningún otro medio resultará efectivo.
Podrán existir momentos de respiro y fluctuaciones en que las cosas se pondrán peor o mejor. En cierto punto puede que incluso parezca como si la crisis se terminó. Estos procesos alternativos son necesarios para que la gente tome mayor consciencia, puesto que el hombre es una criatura de inercia. Por consiguiente, posiblemente experimentemos un período de tranquilidad durante un año o dos, cuando todo se calmará como si la crisis hubiera pasado.
Sin embargo, la tendencia permanecerá igual, porque ya hemos entrado a un estado global en que el mundo entero se encuentra globalmente interconectado. Por lo tanto, los golpes seguirán llegando debido a las relaciones incorrectas entre nosotros.
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La crisis es una forma de hacernos aceptar el programa de la naturaleza y el método de la corrección