Si una persona desarrolla en sí misma un órgano sensorial adicional —el órgano de otorgamiento, en lugar de recepción— y empieza a sentir fuera de sí mismo, una actitud totalmente distinta hacia la naturaleza, entonces ya la explora con la ayuda del otorgamiento, pero siguiendo los mismos principios como en las ciencias de nuestro mundo: investigar, repetir, registrar, reproducir y percepción de la realidad.
Lo transmite a los demás y ellos también investigan y observan los mismos resultados. Basado en el hecho de que esta realidad se alcanza por muchos, se percibe como existente y así, forma parte de la ciencia.
Es difícil transmitir hasta qué grado la Cabalá expande la percepción del tipo de mundo en que vivimos, cómo nos relacionamos con él y cómo lo exploramos. Es decir, empieza a mostrarnos lo subjetivos que somos y lo limitados que estamos, incluso en nuestras ciencias y en todo lo demás.
Es imposible transmitir y no hay necesidad de hacerlo. Los cabalistas no quieren hacerlo. Ellos no buscan seducir a los científicos, es inútil. Si no poseo algún órgano sensorial, ¿cómo puedo hablar de lo que se puede percibir con este? Me parece increíble, falso. Una fantasía.
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