Pregunta
Si un estudiante que está comprometido constantemente en la Cabalá falta a la lección dos veces seguidas, ¿cómo se registra esto en su avance espiritual?
Respuesta:
Esto se graba en su base de datos interna y luego va a ser más difícil para él.
Es como cuando Adán cometió pecado, cuando probó por primera vez la manzana prohibida y le gustó, no fue un descenso, porque no sabía lo que era. La segunda vez, conscientemente no se pudo contener y de nuevo la probó, esto se llama pecado.
Aún en nuestra vida diaria, si alguien incurre en una transgresión por primera vez, lo tomamos en cuenta, no lo sabía, no pudo prever que esto sucedería. Por primera vez, se hace cierta concesión, pero la segunda vez ya no porque después de la segunda ocasión, es casi imposible parar; hay un claro registro de lo que es bueno, que vale la pena hacer y voy tras ello.
Por eso, saltarse las clases…, una vez puede pasar, pero dos veces seguidas, ¡No! ¡De ninguna manera! Deberíamos tener miedo de esto, porque hacerlo así, nos debilita mucho; la persona suele pensar: “Bueno, no salió, no pude, etc” y así nos vamos, regresando a este mundo.
Faltar de forma consecutiva, hace que la persona se acostumbre a ello, aún en el mundo material todo el mundo lo sabe.
No habrá indulgencia para uno por no asistir a las lecciones ni se nos dará pase libre ni nada va a estar bien después de eso. No depende del maestro. ¡Se nos dió una ley espiritual! Si la queremos, hay que respetarla, si no, pues entonces no la tomemos. ¡La ley existe! ¿Qué queremos brincar? Con el Creador así no funciona.
