Uno no debe excluirse del público y pedir para sí mismo ni siquiera para dar satisfacción al propio hacedor, sólo para el público.
Quien se aparta del público para pedir específicamente por su propia alma, no construye. Por el contrario, inflige ruina sobre su alma (Baal HaSulam, “No es momento de juntar el ganado”).
¡Debemos entender claramente que no podemos pedir por nosotros mismos! Pedirle al Creador que me eleve o que me acerque a Él, porque es puro ego.
¿Cómo debo dirigirme a Él? ¡Pidiendo por el grupo, sólo por su bien, sólo como parte de él, dentro de él! Si quiero hacer avanzar a mis amigos, puedo ir al Creador. Pero si pienso en mi propio progreso, es mejor no hacerlo.
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Cuando pido por mí mismo, destruyo mi alma. Pero cuando pido por los demás, la ensamblo, porque hay un alma para todos. Es el único Kli común de Adam; lo único en lo que tenemos que pensar. Se me dio un alma privada para que me preocupara constantemente por ensamblar el alma común.
Está prohibido desconectarse de los amigos, de la asistencia y apoyo mutuos. No podemos vivir fuera de ella.
Del Congreso internacional de Cabalá “Elevándonos por encima de nosotros mismos”