Plenitud y deficiencia en un Partzuf

Dr. Michael LaitmanPregunta: ¿Qué es lo que más deleita al Creador: que hagamos un taller con los amigos o que leamos juntos el Libro del Zóhar?

Respuesta: En el taller, junto con los amigos, nosotros aclaramos nuestras deficiencias y nuestras vasijas en nuestra mente y corazón. Las despertamos y las activamos, así que tenemos que hablar, sentir y darles vuelta en diferentes direcciones. Entonces, el taller es bueno y beneficioso para nuestro trabajo interno. Durante un taller de media hora, la persona tiene muchos pensamientos y profundiza en sí misma tratando las cosas de una u otra manera, al saber y al no saber. Un taller es la preparación de nuestras vasijas, de nuestro deseo, como si caváramos dentro de nosotros mismos, aclarando lo que tenemos dentro, lo que nos sucede allí.

Mientras que al leer El Libro del Zóhar tenemos que sentir una deficiencia por una parte, y la plenitud por la otra. Durante este tiempo, nosotros estamos dentro de la fuente de la Luz del Infinito, y a través de nuestra relación con ella, tenemos que sentir que estamos plenos. Pero al mismo tiempo, tenemos que sentir una deficiencia porque no hemos sabido utilizar correctamente la Luz Infinita. Esto significa que debemos sentir estas dos cosas al mismo tiempo.

Con el fin de descubrir toda la Luz del Zóhar, tenemos que pasar por todas las fases: Ibur (concepción), Yeniká (amamantamiento), Mojin (madurez), y toda la escalera de niveles espirituales, sólo entonces seremos capaces de entender lo que dice El Zóhar. Los autores del Zóhar alcanzaron todos los 125 niveles y desde esta altura escribieron El Libro. Ellos no escribieron desde el primero, segundo, tercero, quincuagésimo, o el septuagésimo nivel mientras avanzaban hacia el nivel 125. Primero alcanzaron todos los 125 niveles, y sólo entonces lo escribieron todo desde esta altura.

Incluso cuando escriben acerca de los niveles que están por debajo del nivel 125, ellos los miran y escriben acerca de ellos desde la altura del nivel 125. Es como un maestro de escuela que le enseña a un niño de primer grado qué es 1 + 1 + 2. Hay una gran diferencia entre la forma en que él maestro entiende esto y la forma en que se lo explica a su alumno. En primer lugar, ellos ascendieron al nivel 125 y luego escribieron acerca de los niveles inferiores.

De tal forma que incluso al leer los artículos que se refieren a las fuerzas impuras (Klipot) o al nivel más bajo, aun así nosotros recibimos la Luz del Infinito a través de ellos. En realidad, esta es la altura desde la que ellos escribieron El Libro del Zóhar. Así que no importa si estudiamos un pasaje corto acerca de un nivel inferior.
(128617)
De la 4º parte de la Lección diaria de Cabalá del 2/25/14, Escritos de Baal HaSulam

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