Pregunta: ¿Qué le pasa a la persona, a su alma, cuando muere?
Respuesta: Cuando la persona muere, su cuerpo muere y ya no se percibe a sí misma a través de su cuerpo. Es todo.
Pero permanecen sus Reshimot. Un Reshimó es un registro, una cadena de información sobre sus siguientes estados. Se registra desde el principio de la creación, hasta el final; y a partir del momento en que su cuerpo muere, sigue realizando esta cadena de Reshimot en otras formas, sin estar vestidos en un cuerpo físico y sin percibir su existencia a través de él.
Pregunta: ¿Pero existe algún reconocimiento de que este es mi Reshimó?
Respuesta: Sí, pero no como ahora.
Pregunta: ¿Mejor o peor?
Respuesta: Depende de su vida.
Pregunta: Entonces, ¿queda cierta conciencia de la existencia propia?
Respuesta: Por supuesto. Nada desaparece.
Pregunta: ¿Qué pasa entonces con el alma?
Respuesta: El alma es esa parte del deseo que se ha corregido y unido con la humanidad, con el fin de ser una buena influencia para ella. Así, el alma sigue existiendo, en el volumen total del deseo general. Esta es una diferente realización, muy exaltada.
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