No traten de ser «los inteligentes» o «héroes» y pelear contra el egoísmo usando sus propios poderes. ¡Nada es más tonto que eso! ¿Quién puede oponerse a la naturaleza? ¿Es siquiera posible?
Nuestro trabajo es elevarnos sobre nuestros egos, lo que significa atraer la fuerza de la Luz y con ella, elevarse sobre el egoísmo como si no existiera. Esto no significa suprimir el ego y dejarse llevar pacíficamente a través de la vida. Nuestro egoísmo permanece, y nos damos cuenta de que es el Creador quien nos da una gran reserva de deseo. Pero deseamos estar por encima de esta.
No aniquilo mi ego ya que es este sobre el cual me elevo. Pero por el momento, no lo tomo en cuenta con respecto a mis relaciones con los amigos, no obstante cuan terriblemente arrogante, insolente, envidioso, y movido por el poder o el honor cada uno de ellos pueda parecer. Nada de esto importa; todo lo que sé es que «el amor cubrirá todos los pecados.» Tú con una pistola y yo con una navaja en la mano nos abrazamos y tomamos todas las decisiones basados en el amor.
Cada uno piensa que él tiene la razón, pero cada uno se anula a sí mismo. El amor significa que acepto la decisión de los otros y ellos aceptan la mía, y de esta manera llegamos a un acuerdo común que nos permite tomar una decisión a un nivel más alto. Nos hemos elevado por encima de nuestro odio colectivo hacia el amor común.
Traten de hacer esto en el grupo, y sentirán un tercer componente dentro de ello: ¡el Creador! Sentirán ya sea que carecen de Él o que Él ya está presente dentro de ustedes.
(27032 – De la cuarta parte de la lección diaria de Cabalá del 19 de noviembre 2010 – La Libertad.)