Pregunta: ¿En qué hay que pensar durante la lectura del Libro del Zóhar para percibirlo con mayor sensibilidad?
Respuesta: En realidad no tengo respuestas a ninguna de sus preguntas, porque todas las respuestas las proporciona la Luz que Reforma. Mi trabajo es únicamente intentar dirigirlos hacia esta Luz.
Algunas personas me preguntan sobre la sensación, deseando saber “¿Dónde puedo obtener más?” Otros preguntas sobre la mente: “¿Cuando la usamos y cuando no?”, “¿Cuando veré y empezaré a sentir todo lo que estudiamos?” “¿Por qué siento ahora de esta manera y después de otra?”. La respuesta es que no tengo respuestas a estas preguntas y no debo tenerlas además. La respuesta es la manifestación de la Luz dentro de una persona, es el estado corregido que se erige contrario a la pregunta, nuestro estado anterior, no corregido.
La persona debe preocuparse sólo por una cosa: “¿Estoy dirigiéndome hacia el rayo de la Luz que se denomina la Luz que Reforma para que me ilumine?”. No hay que pensar en llenar la sensación y la mente con las respuestas a diferentes preguntas, excepto a una que es sobre la Luz que Reforma. Por cierto, Baal HaSulam se reía de los “cabalistas de Jerusalén” que se sabían de memoria los textos de El Libro del Zohar, pero que rechazaban su esencia interior.
Lo único que hay que guardar en la memoria son los conceptos básicos de la ciencia de la Cabalá, porque dirigen a la persona hacia el otorgamiento y le dan la correcta interpretación espiritual de las palabras. Ellas elucidan la meta y dirigen a la persona a ella. Si una persona estudia correctamente, entonces recibirá las respuestas a todas las preguntas tanto en su sensación como en su mente. Avanzará y entenderá lo que sucede y finalmente estará satisfecho con esto. Él verá como va adelantando cada día.
Ahora estamos estudiando El Libro del Zohar intensamente. Por eso, la persona que intenta prepararse antes de la lección y participar seriamente en los estudios durante la lección, en muy corto tiempo debe sentir los cambios cualitativos dentro de sí. Se volverá más sensible a la conexión con los otros, y sentirá como cambia su actitud a su entorno, a los estudios, al atributo del otorgamiento y el Creador. Pero, él debe volverse más sensible para distinguir qué es provechoso y qué no.
Todo esto sucede como resultado de los estudios. Aparte de esto no tenemos nada que hacer. Por eso todo el tiempo hablo solo sobre la intención: exactamente qué deseamos recibir de los estudios, y lo que éstos nos pueden dar.
(Extracto de la lección sobre El Libro del Zóhar, correspondiente al 11 de enero 2010.)
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