Una mirada más allá del punto del Big Bang

Dr. Michael LaitmanLa sabiduría de la Cabalá nos permite descubrir lo que existía antes de la creación de nuestro mundo hasta el Big Bang para buscar cuándo se crearon los mundos. Esto nos permite ver, desde este momento, todas las fases del desarrollo futuro, «hasta el final de las generaciones»

La sabiduría de la Cabalá nos dice lo que la física moderna no puede explicar. Las excavaciones paleontólogos nos dan alguna información sobre las generaciones anteriores y sobre las fases evolutivas que hemos pasado. Pero la ciencia ordinaria no puede decirnos nada acerca de lo que fue creado antes de nuestro mundo ni de lo que está más allá de sus límites, es decir, lo que no es accesible a nuestros sentidos corporales: vista, oído, olfato, gusto y tacto.

La astrofísica estudia el desarrollo del universo a partir del Big Bang y la creación de un espacio donde aparecieron las galaxias, el sistema solar y nuestro planeta. Tenemos alguna información sobre esto, pero antes del Big Bang no había siquiera conceptos como ‘lugar’ y ‘tiempo’, por lo que no puede ser percibido por nuestra investigación. No podemos estudiar lo que sucedió antes de la creación de: lugar y tiempo, por métodos ordinarios.

La Cabalá nos puede ayudar porque nos da nuevas herramientas y órganos sensoriales y, amplía los sentidos y la mente. Por lo tanto, podemos explorar una realidad que no es percibida por nuestros sentidos ordinarios.

Pregunta: ¿Cómo podemos estudiar algo que pasó antes del Big Bang, antes de la creación del universo, si no había nada? ¿No es el Big Bang el punto de partida?

Respuesta: El Big Bang es el punto de partida del mundo corpóreo, que fue creado por una chispa de energía superior que explotó. Los astrofísicos no puede explicar cómo sucedió. ¿Cómo pudo estar tanta energía concentrada en un pequeño punto en el que ocurrió la explosión?

La física ahora se está acercando al punto en el que la energía espiritual se transformó en energía corporal. Desde el mundo espiritual, era una energía microscópica. Esta energía espiritual fue, del mundo de Ein Sof (Infinito) a través de cinco mundos espirituales: Adam Kadmon, Atzilut, Beria, Yetzirá y Asiá.

Y en el límite del último mundo, cuando el mundo de Asiá se debilitó al mínimo, como una pequeña gota en el mar, esta chispa espiritual explotó y se convirtió en energía corporal con la que fue creado el universo entero.

Este es el punto del Big Bang que fue el punto de partida de nuestro mundo. Todo lo que le precedió se aplica sólo al mundo espiritual, es decir, la sabiduría de la Cabalá.
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De la programación de Radio israelí 103FM, 7/jun/15

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