Torá, Deuteronomio 21:07-21:08: Y deberán declarar: “Nuestras manos no derramaron esta sangre y nuestros ojos no vieron. “Perdona a este pueblo, que Tú, Señor, redimiste. No permitas que sangre inocente esté en medio de Tu pueblo”, se les perdonará lo de aquella sangre.
Los ancianos, que simbolizan las cualidades superiores del hombre se dirigen al Creador porque entienden que el Creador les ha dado problemas a propósito, para que determinen, hasta qué grado, aún no son perfectos. Por eso, la petición al Creador atrae la Luz que Reforma.
Por supuesto, no lo hacen por ellos mismos, porque las cualidades superiores del hombre están en nivel de otorgamiento. El Creador, a través de ellos afecta las cualidades inferiores y a través de las cualidades inferiores, Él afecta a los ancianos.
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De Kabtv “Secretos del Libro Eterno” 21/sep/16
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