Existen personas en nuestro mundo, que entienden que pueden estar confundidos por algo, pero lo principal para ellos, es alcanzar el mundo Superior. Yo también pude haber estado confundido, recuerdo los estados por los que pasé, de todos lados me decían esto y aquello.
Pero algún conocimiento previo superior o simplemente mi naturaleza, me condujo en alguna dirección. Supe precisamente lo que necesitaba: Tenía que alcanzar realmente el universo, revelar su aparato físico y matemático y descubrir las fórmulas por las que todo funciona. Eso es lo que encontré.
Todo esto está escrito claramente en la Cabalá, se empieza a entender todo el sistema del desarrollo de causa y efecto que seguimos y que alcanzamos. Llegamos a él claramente por la naturaleza de las fuerzas, no por misticismo.
Para los seguidores de otras prácticas espirituales, esto no tiene absoluta importancia, lo principal para ellos es sentir que están volando. Bien, ¡que vuelen! Y lo más importante es este engaño, vendiendo todo tipo de fetiches a las personas.
En cierto momento, Abraham rompió las figuras de los dioses que él vendía. Es cuando realmente se volvió un cabalista; pero hasta hoy, ellos siguen vendiendo ídolos. Esta es la base de la desilusión de la humanidad. ¿Cómo se puede estar de acuerdo con esto?
Pero ellos, no entienden ni siquiera esto, llegan conmigo y dicen: “Vamos a conectarnos”, es decir, ni siquiera sienten la diferencia. ¿Se entiende la oscuridad en que las personas existen?
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