Cuando las rocas se convierten en perlas

¿Son esas las buenas gemas sobre las que el mundo se sostiene? Pues, en otro lugar, está escrito que son la ruina del mundo, “Esto es Hevel [vanidad], es una enfermedad malvada … y se esfuerza por ir con el viento”, El Libro del Zóhar. Kohelet (Eclesiastes), mencionado en El Libro del Zóhar, fue escrito por el rey Salomón (Shlomo). 

Cada nombre tiene su significado. Shlomo -de la palabra “Shalem”. “Shalem”- de la famosa palabra “Shalom”, que significa “Shlemut”– completo, perfecto.  Es decir, cuando le digo a alguien, “Shalom”, quiero que todo sea perfecto para él. 

Por eso, el nombre Salomón (Shlomo) habla de la perfección lograda por el rey como gran cabalista y sabio. 

Todos saben que fue sabio. Pero muchos piensan que Salomón era solo hombre sabio. No, él no era solo sabio, fue un gran cabalista real. Y su sabiduría es la luz de sabiduría que él recibió del espacio que nos rodea. 

Vivimos en un espacio lleno con energía, información y movimiento eterno. Desde este espacio, con nuestros actuales órganos sensoriales, captamos solo diminutos grumos de materia y percibimos energía e información en la forma de la sucia materia de nuestro mundo. 

El rey Salomón, este gran cabalista, sentía la energía y la información que existe a nuestro alrededor y los describió en su libro Kohelet. Además, Kohelet es uno de sus varios nombres. Kohelet es el más elevado de ellos. 

El rey Salomón descubrió que nuestro estado es el más bajo, que puede ser llamado “piedra”, las bases de nuestro mundo material, el más burdo. Más aún, esas piedras son inamovibles, nada puede construirse de ellas. Es una materia que no puede cambiar. 

Pero esas piedras que conviertes de lo más inamovible y muerto a la cualidad de otorgamiento y amor, es decir, cuando comienzas el proceso, para transformar, tus deseos primitivos, egoístas, solo para ti mismo, que no puedes llevar al otorgamiento y amor, hacia la conexión, realmente se convierten en perlas, en grandes fuerzas positivas sobre las que se sostiene el mundo. 

Y los siete grandes pilares inanimados, se convierten en pilares de luz dirigidos desde ti hacia el exterior.
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De Kabtv “El poder de El Libro del Zóhar” #13

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