Baal HaSulam, “Paz en el Mundo”. Esto es debido a que por naturaleza, el poder del trabajo no es igual para cada persona. Una persona en una hora de trabajo, debido a su debilidad, trabaja más que su amigo en dos horas o más…Así ves que… la labor de un individuo en la condición de la verdad evidente… es completamente intangible ya que esta no puede ser examinada y evaluada de ninguna manera.
Si buscamos justicia social, no podemos confiar en las horas de trabajo porque las personas son diferentes. Tampoco podemos medir los esfuerzos subjetivos de la persona. El éxito de las personas tampoco indica nada, porque unos nacen tontos y otros listos, unos son perezosos y otros energéticos, y así sucesivamente. La herencia no es culpa de nadie, pero tampoco es logro de nadie.
Así es que no podemos juzgar a la persona de acuerdo con la medida de la verdad porque esta es determinada por la raíz del alma de la persona, sus atributos internos no pueden ser examinados, pesados, o calculados. Esto significa que no puedo quejarme de la productividad de la persona o evaluarla justamente. Todos nuestros esfuerzos de medir o calcular las habilidades o los esfuerzos son una mentira total. Les damos calificaciones a los niños en las escuelas, comparamos a todos en la armada, hemos establecido un patrón arbitrario de productividad en el trabajo, y todo esto solo corrompe el desarrollo natural de la persona.
Los expertos están comenzando a comprender el problema después de haber confrontado la crisis en la educación. Pero la situación no ha cambiado. Nosotros simplemente no podemos medir a la persona correctamente basándonos en la medida de la verdad.
(56715 – De la 5º parte de la lección diario de Cabalá del 10/6/2011, «Paz en el Mundo»)