Rav Kook, «El propósito de Israel y de la especificidad de su gente»: Hay una necesidad de más estudios en muchas generaciones que establezca el inicio del alto ideal de servirle al Creador, dado a Israel. Su objetivo es la elevación de la humanidad entera.
Este sólo puede elevarse a través de la elevación del pueblo de Israel, de las personas que comenzaron a iluminar la oscuridad del mundo y tienen que terminar lo que empezaron. Sólo en su propia luz, se realiza claramente su importancia y misión, se aprender cuan sublime y hermosa es esta meta.
Pregunta: La responsabilidad por la humanidad impone una mayor responsabilidad sobre Israel y hace mayores demandas en comparación con el trabajo interno, de grupo…
Respuesta: Yo necesito al grupo a fin de obtener energía de ellos. El grupo es mi superior. Constantemente recargo mi » batería» en el grupo; dentro de él me encuentro con nuestro poder común, con el Creador, y con base en eso, yo apelo a una amplia audiencia.
El grupo es «Israel» de cuyo entorno puedo salir hacia las personas, hacia toda la humanidad. Para mantenerme en contacto con la tarea, con la meta, con el Creador, con el método de corrección, con la fuerza que nos une, con la fuerza del amor y apoyo entre nosotros, yo tengo que estar en el grupo. De lo contrario, no tengo nada con que «llegarles a las personas» porque no tengo ni la fuerza, ni el enfoque correcto.
Pregunta: Entonces, ¿en sus artículos acerca del grupo, Rabash quiso explicarnos cómo «recargarnos» por medio de los amigos para transferirnos energía adicional?
Respuesta: Por supuesto. En general, cada cabalista dijo todo lo que podía revelar decir en su generación. Por lo tanto, Baal Shem Tov comenzó a aplicar el método en forma de Jasidismo, y luego Rav Kook, Baal HaSulam y Rabash continuaron esta revolución, a pesar de la resistencia.
Pregunta: ¿Así que hoy es posible revelar el amor y darle placer al Creador sólo trabajando con el amplio público?
Respuesta: Si. Ustedes llegan a un grupo y se unen con los amigos en amor fraternal para reunir la fuerza y el poder, y tomar el camino correcto para volverse hacia las masas. Es entre ellos que descubrirán la necesidad del Creador. Su relación con Él se manifestará allí. Él habita allí, entre las personas. «¿Quieren encontrarme? Por favor, Estoy allí y no en algún otro lugar».
Esta es la especificidad de nuestro tiempo en la «era del Mashíaj (Mesías)»; nosotros comenzamos a aplicar realmente el método, saliendo «hacia las personas». En el grupo solo nos preparamos, éste nos da fuerza, pero la acción misma se lleva a cabo entre las masas, donde estamos construyendo el «Tercer Templo» a partir de las vasijas rotas del mundo entero.
Es por eso que Baal HaSulam dice que la liberación de Israel es posible sólo después de que el mundo entero aprenda sobre el método de corrección, debido a nuestro trabajo con el público externo. Lo mismo ocurrió con Faraón, quien conoció al Dios de Israel y accedió a dejar ir al pueblo.
Al trabajar con los deseos externos, nosotros no los corregimos todos a la vez, sino que comenzamos el proceso de selección y corrección de las vasijas pertenecientes a los mundos de BYA, y en la misma medida salimos del exilio. Después de todo, el «exilio» para las vasijas de otorgamiento es la incapacidad de corregir el mundo. La «liberación» significa que podemos tomar las vasijas rotas de los mundos de BYA de la humanidad, elevarlas hacia el Creador, y por lo tanto darle placer a Él al permitir que ustedes las abran.
Al hacerlo, nosotros mismos somos simplemente intermediarios, el nexo de conexión.
(115708 – De la 1º parte de la lección diaria de Cabalá del 8/27/13, Escritos de Rav Kook)
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