Torá, Deuteronomio 11:31 – 11:32: Ustedes están próximos a cruzar el Jordán para conquistar la tierra que el Señor, su Dios, les da. Ustedes la tomarán en posesión y se establecerán en ella. Sean cuidadosos en cumplir todos los decretos y las leyes que hoy presento ante ustedes.
“Ustedes están próximos a cruzar el Jordán, para conquistar la tierra” significa poseer el deseo que puede corregir. No podemos corregir todos los deseos en una sola vez. Del vasto número de deseos de toda nuestra naturaleza, podemos sólo, parcialmente, corregir el deseo llamado Israel, que podemos dirigir al Creador.
Por lo tanto, se dice que somos una nación pequeña. Es decir, que podemos llevar a la corrección espiritual sólo una pequeña parte de la naturaleza humana. El resto será corregido al final del camino general de corrección, en el estado de corrección final (Gmar Tikkun).
Primero, debes corregir una pequeña parte del llamado, Israel, después las demás naciones del mundo.
Por lo tanto, la Torá nos motiva a entrar a la tierra de Israel, con los deseos que pueden ser corregidos y a comenzar a pelear con las siete naciones que habitan esta tierra, en otras palabras, pelear consigo mismo, destruyendo todas las intenciones egoístas dentro de mí.
Con los deseos que conquistamos (corregimos), podremos juntarlos y crear un estado inmenso, unido, eso será, revelar al Creador.
La Torá nos habla de cómo, después de 2,000 años de exilio, guiados por el día presente, debemos dirigirnos al estado espiritual en el cual estuvieron nuestros antecesores y triunfar sobre el resto de la humanidad. Debemos comenzar a corregir no solo a nosotros mismos, como una parte pequeña del egoísmo, sino a todo el enorme y universal egoísmo.
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De Kabtv “Secretos del Libro Eterno” 22/jun/16
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