Si una persona no está alegre significa que no se encuentra en un estado espiritual. En la espiritualidad, si deseas avanzar al siguiente estado tienes que finalizar tu estado presente. Eso quiere decir que tienes que estar conforme con el estado presente y colocarle el sello de la alegría. Entonces ascenderás al siguiente nivel más elevado.
Si no alcanzas la alegría en el estado actual, nunca lo vas a finalizar, e incluso puedes retroceder. Es posible que tengas un alcance espiritual, pero si no llegas con alegría hasta él, entonces te volverán abajo y no percibirás la espiritualidad.
La señal de que has completado tu estado actual supone varias fases:
- La sensación de vacío en los deseos egoístas.
- La sensación que deseas estar por encima de ellos en el otorgamiento.
- Estar alegre pues realmente deseas el atributo de otorgamiento, es decir, el estado siguiente.
Si se cumplen estos requisitos se podrá añadir un nuevo deseo.
No importa lo que le esté ocurriendo al hombre en el camino de la corrección, ascensos o descensos, siempre debe estar alegre, como un niño que intenta hacer algo y se siente feliz sin importar si lo logra o no. Lo más importante es el esfuerzo que realiza y que lo hace crecer.