Pregunta: La base del mundo espiritual es la importancia que le atribuimos. Está escrito en las fuentes que sólo hay un gramo de luz y un gramo de deseo, lo demás está determinado por la forma en que lo tratemos y la importancia que le damos a ciertos fenómenos ¿cómo sucede?
Respuesta: Estamos acostumbrados a que en nuestro mundo el deseo y la satisfacción tienen cierto estándar de medida proporcional: metros, metros cúbicos, parsecs, distancias, toneladas, etc.
Sin embargo, en el mundo espiritual, no hay dimensiones materiales. Todo allí se mide sensorialmente, por la relación de unos con otros. Por eso, si me importa un gramo de algún material que pueda ser más precioso para mí que el universo y toda mi vida, porque si este gramo es el inicio de una nueva vida, lo trato como algo que llena el universo. Para mí, es lo más grande. Mide el valor espiritual del objeto.
En otras palabras, un objeto espiritual no tiene dimensión geométrica ni métrica y está determinado sólo por el tamaño de mi actitud, mi atención y la grandeza del objeto ante mis ojos. Son medidas puramente subjetivas.
Pregunta: En principio, ¿una persona en logro espiritual o un cabalista, disfruta, no de lo que el Creador le da, sino de la importancia del Creador ante sus ojos?
Respuesta: No siente lo que el Creador le da. Siente sólo en la medida de la grandeza de lo que el Creador le da.
Pregunta: Tomemos un ejemplo de nuestro mundo. Digamos que una taza de café también es de esta fuerza de unidad. Sólo puedo tomar un café. Pero si una persona importante lo hizo para mí, naturalmente me sentiré satisfecho, no sólo con la bebida, sino también con la importancia de esta persona, que es grande ante mis ojos y ante los ojos de la sociedad, ¿así funciona?
Respuesta: Sí.
Comentario: Pero aún así, debe haber algún tipo de material.
Mi respuesta: Debe haber material en nuestro mundo. Por eso partimos del mundo corpóreo, que se crea para que podamos pasar de él a otras categorías más abstractas.
Pregunta: Quiere decir que debo tratar los placeres de este mundo así: esto me lo da el Creador, lo único que me falta es la importancia de quien me lo da.
Respuesta: Sí, pero cuando desarrollo importancia por aquel de quien recibo y para mí es más que la importancia del objeto recibido, estoy en otras dimensiones.
Es decir, el objeto en sí ya no importa a mis ojos. Lo único que importa es la importancia de quien me lo dio. Luego paso de las sensaciones de nuestro mundo corporal a las dimensiones y sensaciones del mundo superior: esto lo recibí del Creador.
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De Kabtv «Estados espirituales»
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