Pregunta: ¿Qué es lo malo de la separación si hay reglas generales claras sobre la cooperación entre las partes que se separan, de la misma forma que en el cuerpo humano cada parte tiene claro su propio papel?
Respuesta: No hay nada malo en la separación, excepto que tenemos que corregirla. Esta es la pregunta que surge: ¿Para qué estoy corrigiéndola? Es necesario que la importancia de esta actividad sea determinada por la meta correcta.
Esto quiere decir que yo no estoy haciendo esto para sentirme bien, sino que me elevo a otro nivel de toma de decisiones. Mi cerebro, intelecto y emoción, todo lo que es mío no me pertenece personalmente, sino que les pertenece a todos. Cada vez que me elevo a un nivel más alto, paso de un enfoque individualista de determinación de mi estado, a un punto de vista colectivo, a un punto de vista que es para el beneficio de todos, como la cabeza de un grupo que se preocupa por el bienestar de todos sus miembros.
Después de eso, el grupo se me revela con un ego aún mayor, incluso con mayor rechazo mutuo que este, como si hubiera un descenso colectivo, una caída. Y así, una vez más yo tengo que elevarme a un nivel aún más alto de cabeza del grupo y otra vez conectarlos juntos.
Todo el trabajo es ser una cabeza que maneja y corrige toda la separación, como se nos ha dicho: «El mundo fue creado para mí».(130928)
De la preparación para la lección diaria de Cabalá del 3/25/14
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