Salmos 32; 10-11: Muchas son las aflicciones del impío; pero al que confía en el Señor, lo rodea la misericordia. Alégrense en el Señor y regocíjense los justos; y canten con júbilo todos ustedes los rectos de corazón.
Si la persona abre su vasija, empieza a sentir que ya está todo preparado desde Arriba para ella y que todo ha sido preparado de antemano con misericordia. Lo único que le falta a la persona es separase de su deseo de recibir, y si no se separa de él, al menos debe separarse de lo que depende de él. Esto también lo preparan desde Arriba.
Entonces la persona alcanza la adhesión con el Creador, como está dicho: «pero al que confía en el Señor, lo rodea la misericordia».
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De la preparación para la lección diaria de Cabalá del 4/25/14