Todo cambia bajo la influencia de la Luz.

Rabash, El asunto de la importancia de los amigos: Pero ¿cómo se puede considerar al amigo más grande que él si, por el momento, ve que tiene virtudes más grandes que su amigo, es decir, que tiene más talento y mejores atributos?

Es correcto. El ego siempre nos engaña. Pero bajo la influencia de la Luz todo cambia.

Somos seres egoístas. No hay nada en mí, sólo cien por ciento de egoísmo. A medida que la Luz influye en mi, debilita un poco mi ego y comienzo a sentir a los demás por encima de mí.

Empiezo a comprender que lo que había visto antes y lo que veo ahora, es diferente, depende sólo de la intensidad de la Luz que me afecta. Y no hay verdad.

Por lo tanto, si quiero acercarme al Creador y ser como Él, pido que la Luz actúe sobre mí tanto como sea posible. Al mismo tiempo, entiendo que soy la persona más lenta y pequeña, que no entiendo nada. Pero no me importa; por el contrario, me agrada porque revelo la verdad de que no hay nada en mí excepto egoísmo.

Así, la primera acción de la Luz es la sensación de que todo en mí habla de egoísmo. Y el segundo es que, en lugar del ego, la propiedad de la Luz comienza a tomar forma en mí.
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De Kabtv «La última generación» 30/may/18

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